¿Te quedas sin frenos?

 

En este tipo de casos, lo mejor es aumentar el tamaño de los discos al máximo permitido tanto por el cuadro como por la suspensión: a mayor diámetro más material para disipar el calor. Por otra parte, hay que puntualizar que las balatas metálicas provocan más calor.

 

Si ya llevas pastillas orgánicas y discos grandes y continúan los problemas, un tratamiento extra es que pruebes unas balatas con disipador de calor, tipo las Shimano Ice Technologies. También hay algunas marcas de balatas que las comercializan para otras marcas de frenos además de Shimano, como Kool-Stop o Alligator, a un precio que puede llegar a los 500 pesos según el modelo. Estas balatas se caracterizan por tener el material frenante junto a una base de aluminio (gran transmisor de temperatura) que finaliza en un mini-radiador, con aletas por las que fluye el aire para un rápido enfriamiento.