¿Qué hacer cuando un automovilista molesto te grita?

 

Pasar demasiado tiempo en la bicicleta eventualmente te llevará a enfrentarte a esto: un motociclista o automovilista molesto te gritará y tratará de que te enganches. Si tienes suerte, su interacción será con el claxón y un grito sin detener la marcha. Pero hay otros personajes al volante que tendrán un discursos de groserías e insultos para soltar de inmediato.

¿Te ha sucedido en la calle o en carretera? ¡Seguramente sí por la falta de cultura vial en nuestro país! ¿Pero qué es lo que haces para no caer en provocaciones o eres de lo que replicas cada insulto?

Recuerda que como ciclista eres más vulnerable en estos conflictos, así que trata de mantenerte a salvo –sin responder–, tomándolo como una prioridad sin escuchar los insultos, dice el experto en seguridad vial ciclista, Carl Larson.
“Antes de caer en provocaciones, recuerda que no estás lidiando con alguien racional. Piensa en apuntar las placas del auto por si las cosas se ponen intensas con el automovilista”.

Toma en cuenta que no cambiarás la postura de la otra persona si comienzas a gritarle, no importa que tengas la razón, pera él/ella tu estás mal y su mente estará bloqueada ante cualquier comentario. Si te insulta u ofende, resiste las ganas de ponerlo en su lugar, es mejor que le desees un buen día y sigas tu camino.

Olvida el pensamiento de que eres un cobarde o muy valiente por enfrentar o no a alguien en un altercado así. Ser inteligente no tiene que ver con ese tema. Si te sientes físicamente amenazado, recurre a la policía o solicita ayuda, sobre todo si eres mujer. También recuerda ser testigo si alguien más está siendo agredido, podrías marcar la diferencia para tu compañero/a ciclista.

Recuerda que lo más importante de el ciclismo es la diversión, y la mejor manera de mantenerlo es seguir las reglas viales y de ciclismo sin engancharte en la negatividad. Piensa en lo que no te gustaría que te hicieran y evitar ser una molestia para los automovilistas y así reducirás la posibilidad de que seas agredido por ellos.