Pies fríos, pies muertos

Lo que experimentaste fue un principio de congelación. Es una situación que, como es lógico, debes tratar de evitar si pensamos que salimos en bici para disfrutar y pasarla bien. Llegar con ese nivel de enfriamiento en los pies no es precisamente divertido. Los síntomas son principalmente la pérdida de sensibilidad. En estos casos, lo más recomendable para descongelar los pies es sumergirlos en agua templada. Se debe evitar el agua a mucha temperatura, ya que la insensibilidad puede generar quemaduras. Asimismo, no es recomendable masajear los pies ni aplicar fuentes de calor seco, es decir, aire caliente o acercarlos a una estufa u hoguera. En el proceso de descongelación es normal sentir desagradables sensaciones de picor e incluso dolor. Si llegas a notar que los dedos no van recuperando la sensibilidad, acude al hospital para su tratamiento farmacológico. Repasemos qué puedes hacer para no llegar a esta situación:

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1. LA TEORÍA DE LAS CAPAS. Al igual que en el resto del cuerpo, es muy eficaz usar varias capas de ropa de aislamiento. En este caso, hablamos de utilizar dos pares de calcetines finos mejor que unos gordos. Y añadir un cubrezapatos para poner una capa más de aislante.
2. Por supuesto, usar ZAPATOS DE INVIERNO.
3. En caso de lluvia, tratar de UTILIZAR CUBREZAPATOS que sea impermeable.
4. Revisar si la zona de las grapas del zapato puede ser un punto de acceso fácil de agua. Si así fuese, se podría tratar de IMPERMEABILIZAR usando un poco de silicón, o bien, cambiar de calzado.
5. NO APRETARSE MUCHO LAS ZAPATILLAS. Esto es importante para permitir una buena circulación de la sangre.
6. Para casos extremos, en el mercado existen PLANTILLAS CALEFACTABLES con las que se conservan los pies calientes de dos a tres horas. El único inconveniente es que llevan una batería un poco voluminosa, la cual se puede enganchar sin dificultad en el cubrezapato.