¿No tienes una bomba de alta presión? no hay problema

Para montar una llanta necesitamos guardar aire a presión y liberarlo de golpe; nosotros lo vamos a construir de manera sencilla, rápida y efectiva, con una botella de plástico para refrescos, que están diseñadas y preparadas para soportar presión en su interior (mínimo 7 bar por lo que he indagado por internet), un par de válvulas para roscar y una manguera de la misma medida que las válvulas, bomba de pie o similar. Le hacemos dos agujeros al tapón para roscar las válvulas. A una de ellas le conectamos la bomba de pie, y a la otra, tras retirarle el obús, le conectamos la manguera de plástico, la cual conecta en su otro extremo con la válvula de la rueda, también sin obús para facilitar el paso del aire. Cortamos el paso del aire hacia la rueda doblando la manguera y vamos metiendo aire en la botella hasta los 6 bar. Una vez alcanzada la presión dentro de la botella, sólo nos queda abrir el paso del aire hacia la rueda y ver como la llanta se “bota” dentro del rin.