La reina dentro y fuera del asfalto

 

Es francesa, tiene 22 años y, hoy por hoy, es la reina del ciclismo mundial. Pauline Ferrand-Prévot parece una ciclista creada por encargo. Tiene una calidad sobre la bicicleta gracias a la cual, por ejemplo, se proclamó Campeona del Mundo en ruta hace un mes en Ponferrada (España). Pero eso no es todo, sus ojos azules y su melena rubia gustan tanto o más que sus pedaladas.

Ferrand-Prévot comenzó a vencer desde muy joven. Ya en 2009 y 2010 se proclamó Campeona del Mundo de Cross-Country en categoría junior y, cuando se convirtió en profesional allá por 2012, las victorias no dejaron de llegar. Ha sido varias veces Campeona de Francia y esta misma temporada se ha impuesto en prestigiosas pruebas como la Flèche Wallonne o la Emakumeen Euskal Bira. Además es la primera mujer que pone en aprietos a la todopoderosa Mariane Vos, mujer a la que ya ha vencido en varias ocasiones.

Pero el gran triunfo de esta joven francesa llegó en el Campeonato del Mundo de Ponferrada. A la cita celebrada en España llegó entre las aspirantes al maillot arcoíris, pero cuando la carrera se seleccionó en los últimos kilómetros, pocos se acordaron de ella. Once mujeres se iban a jugar el triunfo en el sprint final, y allí nuestra protagonista fue la más rápida.

Se impuso a consagradas ciclistas como la ya citada Vos o la sueca Emma Johansson, lo que ponía de manifiesto el relevo generacional en el ciclismo. Ella, junto a corredoras como Hanna Solovey o Tiffany Cromwell, son el futuro de este deporte. Jóvenes, con mucha clase sobre la bicicleta y, además, guapas. Buenas noticias para el ciclismo femenil.

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