La presión perfecta para tus llantas
Son como los tenis para un corredor, pero en la bici. Por lo tanto, es primordial que se encuentren en perfectas condiciones.
La presión de aire que llevan es crucial para un buen manejo y desempeño en cada sendero. Dependiendo tu peso, el terreno y condiciones donde ruedes, será la presión a la que deberás poner las llantas.
Por lo regular, 40 libras de presión son buenas para un terreno muy rudo con muchas piedras. Con esta presión tus llantas se sentirán muy duras, perfectas para recibir todo tipo de obstáculos directamente de frente. Toma en cuenta que siempre dependerá el tipo de manejo que le des a tu bici y también tu peso. Por ejemplo, si pesas alrededor de 70 y 85 kg, las 40 libras serán muy útiles, sobre todo en terrenos muy firmes y agresivos.
Cuando el terreno es muy húmedo o lodoso, lo conveniente es traer las llantas a una presión de 30-35 libras. De esta manera, más superficie de la llanta hace contacto con el suelo, logrando un mejor agarre. Esto también funciona en terrenos donde la tierra está muy suelta.
También influye el tipo de llanta. Por ejemplo, cuando la llanta es tubeless (sin cámara), no requiere tanto aire dentro de ellas porque no existe una cámara dentro que pueda poncharse con una roca. Por lo que lo que la presión normal en ese tipo de llantas es de 30 libras.
Cuando las llantas son más delgadas, es recomendable traer una buena presión de aire. Esto es porque este tipo de llantas regularmente se usan en bicicletas de cross country o trail, por lo que deben de ser muy eficientes en las subidas. Las llantas más infladas harán que avances más rápido, lo cual hace que la subida sea menos pesada.
Considera que este detalle puede marcar la diferencia entre que disfrutes la rodada sin ningún contratiempo o que tengas que detenerte para encontrar la presión ideal en tus llantas.
