Estrés oxidativo ¿qué es eso?

 

Seguramente has visto aquí y en otros posts que recomendamos muchísimo los antioxidantes en diversas presentaciones. También habrás escuchado que son muy buenos como antioxidantes, pero tal vez no te han explicado cómo funciona esto. Es importante que sepas qué hacen en tu cuerpo y cómo convivir con ellos. Empezaremos por la base y los radicales libres son el primer punto a tocar:

 

Radicales libres

Otro tema recurrente en los medios y la publicidad son los radicales libres, y son básicos para entender el tema de los antioxidantes. Aquí vamos a unir los dos.

Los radicales libres son, en palabras simples, moléculas que resultan de la respiración y de otros procesos celulares. Como tú sabes, en la respiración utilizamos oxígeno, y el oxígeno es un átomo extremadamente reactivo. Cuando un átomo es muy reactivo, tiende a formar moléculas con todo aquello que se encuentra, y el oxígeno, al unirse a otros átomos, tiende a formar óxidos.

Los efectos de los radicales libres son varios: así como ayudan a eliminar agentes patógenos por su capacidad oxidativa, los óxidos te hacen daño ya que tus tejidos también son suceptibles al daño producido por el óxido.

 

¿De dónde vienen los radicales libres?

El humo del cigarro, la radiación UV, dietas pobres e incluso el ejercicio son fuentes de radicales libres. El estrés oxidativo ocurre cuando los radicales libres superan el equilibrio (homeostasis): el daño a las células sobrepasa la capacidad del cuerpo de repararlas.

 

Respuesta del cuerpo

El cuerpo tiene mecanismos que ayudan acontrarrestar el estrés oxidativo, como vitaminas, péptidos y otras sutancias, como el ácido úrico, que llamamos antioxidantes (o con capacidad antioxidante). Cuando el estrés oxidativo se presenta, estas sustancias actúan y lo mantienen en niveles que el cuerpo puede aprovechar para mejorar el sistema inmune.

En el deporte, las células pueden verse afectadas por las altas cantidades de oxígeno que el entrenamiento y las competencias producen, por lo que es importante combatir este daño. Para esto hay distintas opciones, y la dieta es una de ellas.

Antioxidantes en la dieta

Los antioxidantes naturales del cuerpo algunas veces no alcanzan a contrarrestar el efecto de los radicales libres, y es entonces que el consumo en la dieta o en suplementos puede ayudar a mejorar la respuesta ante estos.

Las principales fuentes de antioxidantes en la dieta son frutas y verduras, así como algunas leguminosas, aunque algunos ácidos grasos, como el Omega-3 también pueden mejorar la capacidad antioxidante.

Algunos alimentos ricos en antioxidantes son:

  • Moras 
  • Manzanas
  • Naranjas
  • Guayabas
  • Berenjenas
  • Vino (recuerda no abusar de su poder «antioxidante»)
  • Salmón
  • Cebolla
  • Ajo

El consumo de antioxidantes en la dieta, y como suplemento, es controversial, ya que en algunos casos como el cáncer de pulmón pueden favorecer el desarrollo de la enfermedad en vez de contrarrestarlo. Es importante que antes de tomar suplementos o aumentar el consumo de algún grupo de alimentos, hables con un profesional de la salud calificado para que te oriente en los cambios a tu plan de alimentación.

 

Entonces, ¿qué dice la ciencia?

El uso no está contraindicado, pero existen algunos protocolos definidos que pueden ayudarte a recuperar mejor después de entrenamientos intensos y competencias. Se han hecho estudios en carreras muy largas y en competencias como el IRONMAN de Hawaii, y se ha logrado reducir bastante el estrés oxidativo. Te recomendamos que visites a tu nutriólog@ y platiquen acerca de los objetivos que puedes cumplir y en qué te puede ayudar la suplementación.