¿Entrenar en ayunas?

 

 

Las personas que practican este tipo de entrenamiento piensan que estando en ayunas van a quemar más grasa y de este modo van a adelgazar más. Esto no es cierto, ya que según los estudios realizados al respecto no se ha observado que el grupo que entrenaba en ayunas adelgazara más que el que lo hacía después de desayunar.

 

Ahora si el objetivo es perder peso, lo más importante es que se produzca un déficit calórico, es decir, que gastemos más calorías de las que ingerimos. Y para esto, da igual si hacemos el ejercicio en ayunas o no. Es más, si desayunamos, nuestros entrenamientos podrán ser más intensos, y por lo tanto quemaremos más calorías. De esta forma, perderemos más peso.

 

Otra justificación de este tipo de entrenamiento es que enseñamos al cuerpo a funcionar quemando más grasa. Si esto sucede, ¿cómo nos puede ayudar en nuestras salidas a rodar? Sabemos que cuando pedaleamos nuestros músculos van consumiendo de forma combinada grasas y azúcares en diferentes proporciones. A medida que aumentamos la intensidad en el pedaleo aumenta el gasto de azúcares y disminuye el gasto de grasas.

 

La energía que podemos obtener quemando grasa es prácticamente inagotable por su elevada capacidad calórica y la gran cantidad que somos capaces de almacenar. Sin embargo, los azúcares (glucógeno muscular y hepático) se agotan en un par de horas sin problema si pedaleamos de forma intensa. Cuando esto sucede, aparece la fatiga, el cansancio y la sensación de pérdida de fuerza.

 

Por este motivo, uno de los objetivos del entrenamiento de resistencia es conseguir que nuestros músculos sean capaces de usar al máximo la grasa como combustible con la idea de retrasar el agotamiento del glucógeno. Y es lo que se busca con el entrenamiento en ayunas.

 

Hay unos cuantos estudios publicados en los que se ha valorado esta cuestión. Básicamente han consistido en hacer dos grupos de deportistas que hacían el mismo entrenamiento, unos en ayunas y otros no. En ningún estudio se ha conseguido confirmar que después de varias semanas entrenando en ayunas se consiga un mayor consumo de grasas.