¿Puede una cuña o un espaciador arreglar tus problemas de rodilla?

 

El uso de este tipo de suplementos o adaptadores debe realizarse por un biomecánico que tenga un profundo conocimiento sobre la materia.

Las cuñas son unas piezas de plástico que como su propio nombre indica sirven para cantear las suelas de una zapatilla de ciclismo. Se colocan entre la cala y la zapatilla y lo que hacen es alterar el ángulo de la suela. En función de cómo se coloquen pueden invertir o revertir el pie, es decir, inclinar la suela de la zapatilla hacia dentro (dedo meñique del pie más elevado) o hacia fuera (dedo gordo del pie más elevado).

Su uso está indicado cuando aparecen dolores en la cara anterior o interna de la rodilla siempre y cuando el ciclista presente estas circunstancias:

– Varo de antepie acentuado en observación estática.
– Alto grado de pronación mientras se pedalea.
– Se estén usando unas plantillas estabilizadoras.
– El sillín y las calas estén correctamente situados.

 

Contrariamente a lo que se supone que hacen, en raras ocasiones mejoran el recorrido vertical de la rodilla al pedalear. El uso de espaciadores entre el pedal y la biela para aumentar la separación de los pies al pedalear se emplea con ciclistas que tienen problemas de rodilla que puedan relacionarse con una forma de pedalear en la que las rodillas se van claramente hacia fuera y no se pueda corregir. Simplemente se trata de conseguir una mejor alineación vertical entre el pie y la rodilla.