Enruta2
Competencia anual de ciclismo de ruta, que se registra en parejas con la finalidad de ayudarse mutuamente en un recorrido de 125 kilómetros o 75 kilómetros. Dirección a Valle de Bravo, cronometrando tres etapas para el gran premio en la categoría mixta. Estos eventos suelen ser muy interesantes, ya que se pueden aplicar distintas técnicas por las diferentes zonas que debes pasar, tales como las cronoescaladas de 4, 17 y 8 kms al concluir el viaje en un poblado llamado “Raíces”, que se encuentra a 3,500 metros sobre el nivel del mar, siendo uno de los poblados más altos del país y disfrutando de los paisajes más agradables que un ciclista puede ver durante el recorrido.
Esta ruta parecía ser una gran batalla, puesto que se encontraban equipos como Turbo, Alubike y Farmacias de París, entre otros, así como diferentes modalidades como triatletas, ruteros, de montaña y grandes apasionados.
El evento estuvo bien dirigido y organizado, pero al parecer aún hay que afinar detalles de logística para este tipo de rutas.
Todo pintaba bien, todos hacían su mayor esfuerzo y peleaban por los primeros sitios, el abastecimiento parecía tener un ligero imprevisto, pero nada que no se pudiera resolver, se deleitaron con los hermosos paisajes de la ruta y se trabajó en equipo.
Pasaron unas horas y los equipos empezaron a llegar a la meta, sin embargo cuando se acercaba el momento de la premiación, el problema surgió puesto que habían “cambiado algunas reglas del juego”. El mal entendido comenzó por una confusión en la inscripción de los participantes en parejas y elite, ya que el reglamento decía que sólo si se juntaban un número determinado de equipos harían la repartición de premios a los primeros lugares.
Después de una supuesta negociación para repartir al final la bolsa de premiación, la sorpresa vino cuando los ganadores elite, al reclamar su recompensa, no encontraron consistencia en el acuerdo.
Desde el punto de vista de los organizadores, las reglas eran muy claras y al no haberse reunido la cantidad de corredores profesionales suficientes, no habría tal premiación. Desde la perspectiva de los competidores, quienes no fueron capaces de reconocer al responsable de los organizadores con los que se realizó una mediación, hubo un claro descontento.
Otro punto a mejorar en la edición 2015 sería definitiva la medición en las cronoescaladas, ya que a pesar de que éstas serían el parámetro de competencia, el cronometraje contabilizó el trayecto total de la carrera.
Es así como la edición 2014 de EnRuta2 generó diferentes impresiones entre sus participantes (tanto positivas, como negativas). Pero si nos preguntaran: ¿te gustaría ser parte de EnRuta2 el próximo año? BIKE no dudaría en apoyar de nuevo la iniciativa que, a pesar de tener áreas de oportunidad para mejorar, sigue siendo un evento fuerte y consolidado que al hacer un balance definitivo deja más satisfacciones que decepciones entre sus participantes.
