El pecado de los ciclistas

 

Uno de los puntos débiles que tienen los ciclistas en común es: el core. Pero lo que ellos ignoran es que un core fuerte es el secreto de un correcto rendimiento encima de la bici, ya que además de su función para estabilizar el tronco funge como transmisor directo de fuerzas entre las extremidades superiores y las inferiores.

Un core estable y fuerte te permitirá mantener un técnica correcta y posicionamiento del cuerpo, lo cual se traduce en una transmisión de fuerzas más eficiente y con ello una relación directa con la mejora en el rendimiento deportivo. Además, un core fuerte retrasa la aparición de la fatiga muscular de esta zona, permitiendo mantener posiciones aerodinámicas durante periodos de tiempo más prolongados.

Integra la siguiente rutina de entrenamiento que te proponemos y complementa tus sesiones regulares sobre la bicicleta o el gimnasio.