Descalificado por tramposo

 

 

El italiano fue mandado a casa después de sujetarse al coche del equipo Astana para recuperar una desventaja sobre el pelotón de cabeza después de quedar atorado en una caída múltiple kilómetros atrás. 

 

Al respecto Nibali declaró «Me siento arrepentido y avergonzado. Acepto la decisión y según el reglamento es la correcta, pero hubiera preferido que me sancionarán con diez minutos y poder continuar en carrera. Me parece excesivo. Con el reglamente en la mano es lo que había que hacer y lo acepto, pero habría que haber tomado en consideración que era una situación especial».