¿Cuál es la mejor forma de tratar lesiones? ¿Con frío o calor?

 

Siempre existirá una manera de resolver los dolores por las lesiones, algunas veces es con terapia de calor, otras te recomiendan hielo para sanar esas molestias. Sin embargo, ¿sabes cuándo debes utilizar cada uno? Es muy común cometer este error cuando estás lesionado, buscas la forma más rápida y eficaz, aunque no siempre sea la mejor.
Aquí te decimos cómo debes aplicar cada una de las opciones para tener una óptima recuperación.

¿Cuándo aplicar el calor?
El hielo contrae los vasos sanguíneos en tu piel y los tejidos fundamentales, bajando el flujo sanguíneo. Todas las reacciones químicas son disminuidas, incluidas aquellas que contribuyen al dolor y la inflamación.
Para usar la terapia de frío correctamente, utiliza una bolsa de gel, hielo triturado o vegetales congelados por 15-20 minutos cada 2-3 horas. Coloca una toalla entre el hielo y la piel para evitar quemaduras o congelación. Si prefieres utilizar los vegetales congelados, marca la bolsa para que no la utilicen después de que las descongelaste.

Usa el hielo así:
Dentro de las 24-48 horas después de una lesión. Así obtendrás la mayor cantidad de beneficios para evitar acrecentar la lesión.
Después de un entrenamiento muy intenso, esto puede ayudar a prevenir dolor muscular post-entrenamiento.
En lesiones en las que sientas caliente la zona en la que estás tocando. Si es así, es señal de inflamación.
Si estás embarazada, hazlo cerca de la zona abdominal. Hacerlo con aplicaciones calientes puede aumentar la temperatura de tu abdomen y lastimar a tu bebe.

¿Cuándo aplicar el calor?
El calor aplica de forma diferente, abre los vasos sanguíneos e incrementa el flujo, liberando nutrientes que pueden ayudar a relajar los músculos. La opción caliente también reduce el dolor si lo alternas con masajes en las terminales nerviosas. Úsalo con una toalla húmeda entre la piel y la bolsa para evitar quemaduras.

Usa el calor así:
Uno o dos días después de un entrenamiento. En este caso, evita la bolsa caliente y genera calor frotando suavemente en la zona.
Para dolor crónico, como dolor de espalda baja. Los baños tibios pueden ayudar para liberar tensión de músculos contracturados.
En una lesión de varios días debes aplicarlo para liberar nutrientes que ayuden a sanar. No hay un tiempo exacto para usarlo, pero lo recomendable es que sea cuando termine de estar caliente la bolsa/compresa.

Con Información de Prevention