Consiente a tu cuerpo

 

La omisión del calentamiento previo a la realización de un esfuerzo importante como lo es pedalear te pone en riesgo de sufrir una lesión, de ahí la recomendación de los entrenadores y médicos de estirar los músculos antes de practicar cualquier deporte.

¿Y cómo lograrlo? 

Con una buena sesión de masaje antes y después de la actividad física. De esta manera, los ciclistas de alto rendimiento se protegen de los molestos esguinces, desgarres y/o tirones durante su entrenamiento.

Desde la época de Hipócrates

El término masaje proviene de la palabra francesa «massage» o del árabe «mase», que significa tocar o palpar. Este sistema abarca manipulaciones de influencia mecánica sobre el cuerpo y puede ser aplicado con las manos del masajista o por medio de aparatos especiales, su objetivo está dirigido a desarrollar y restablecer funciones de tu organismo. Probablemente unas de las primeras manipulaciones del masaje fue la acción natural o instintiva de frotar o friccionar una zona adolorida. Los especialistas en el tema no saben con exactitud quién fue su inventor y dónde fue aplicado por primera vez, sin embargo, es posible que como elemento de la medicina popular tuviera mucha importancia en la vida de todos los pueblos y las tribus de la antigüedad.

El padre de la medicina, Hipócrates, por ejemplo, escribió lo siguiente acerca del tratamiento de dislocaciones: ìEl médico debe ser un experto en muchas cosas y también en el masaje, porque éste puede consolidar una articulación demasiado débil y suavizar una demasiado rígidaî.

¡Mejora tu rendimiento!

Dentro de la variedad de masajes que existen hoy en día encontramos el llamado deportivo-kinesiológico que va encaminado a la preparación del cuerpo para la realización de una actividad física intensa, para evitar espasmos musculares u otras lesiones deportivas, así como para eliminar toxinas y relajar tras la actividad deportiva. 

En pocas palabras: ¡Da mantenimiento a tus músculos y los conserva en buen estado! Dahanara Ramos, terapeuta, explica: “Para aplicarlo es necesario conocer los grupos musculares específicos implicados en la disciplina deportiva; por ejemplo, en los deportes que exigen mucha fuerza hay que prestarle más atención al masaje de los músculos extensores de la espalda (los que te ayudan a extender los brazos), extremidades superiores e inferiores (brazos y piernas), abdominales y pectorales. En los gimnastas y lanzadores es de gran importancia enfocarlo en los bíceps y tríceps; en los corredores y saltadores se realiza sobre los glúteos, cuadríceps, gemelos y tibiales. En los deportes de resistencia se presta especial interés a los respiratorios (diafragma, intercostales y abdominales) que también reciben una carga bastante fuerte”. En conclusión, el especialista debe programar tus sesiones de masaje teniendo en cuenta las particularidades del entrenamiento.

La técnica de masaje

Previamente al partido o juego el masajista hace un drenado del músculo con las manipulaciones en kinesiología (fricciones, golpeteos o deslizamientos) de una manera fuerte y sostenida para que el músculo se vacíe de toda la sangre que tiene acumulada y entonces empiece a llegar nuevamente sangre oxigenada a las arterias, a los pulmones o al cerebro.

Con este aumento del flujo sanguíneo se acrecenta la temperatura de la zona, y se obtiene una mejor elasticidad del músculo evitando así su pronta fatiga. Una vez finalizada tu actividad física es muy común que los músculos queden llenos de toxinas. De tal manera, la técnica de masaje que se emplea es muy similar a la descrita anteriormente, sólo que en este caso el terapeuta se concentra en drenar las toxinas; es decir, eliminarlas de tu cuerpo, para que el músculo vuelva a adoptar su posición normal y sus fibras no queden abultadas o contraídas. 

Escucha siempre a tu cuerpo

El masaje deportivo kinesiológico básicamente es una forma de terapia que se aplica sobre personas sanas que realizan deportes, también permite la corrección de lesiones exclusivamente musculares, a través de diagnósticos o pruebas en el cuerpo como la llamada «Arm reflex». ìSe basa en el reflejo del brazo, introducido por Van Assche, el cual permite evaluar mediante la coincidencia o no de los pulgares del paciente, dándonos con ello el signo indicativo de las dos opciones sí o no en sus respuestas para identificar qué área del organismo trabajar primeroî.

La duración del masaje por lo normal es de una hora y se efectúa sobre una cama de madera, preferentemente en un lugar tranquilo con música relajante. La técnica a desarrollar depende mucho del tipo de lesión, por ejemplo, si el problema se presenta en la zona lumbar, se trabaja de manera integral toda la espalda, los glúteos y las piernas. 

Los resultados los empiezas a ver desde el tercer masaje y para que desaparezcan totalmente tus molestias debes asistir a diez sesiones por lo menos. El terapeuta nunca tiene que sobrepasar el umbral de dolor del paciente. 

Por otra parte, resulta indispensable que el terapeuta conozca la terminología anatómica básica y fundamental, y esté certificado en la materia. Las personas no aptas para recibir este tipo de masaje son las que padecen cáncer, hipertensión, epilepsia, problemas cardiacos, del sistema circulatorio, etcétera.

El masaje deportivo-kinesiológico de acuerdo con su objetivo y sus tareas se clasifica en: inter, pre y post competición.

 

1. INTER-COMPETICIÓN. Es el masaje que se aplica de manera general durante la fase de entrenamiento. El masaje será, en general.

• Se busca conseguir: La prevención de lesiones por sobreentrenamiento, eliminar la sobrecarga muscular, disminuir la fatiga permitiendo mejorar el rendimiento del ciclista.
• Maniobras básicas: Fricciones superficiales y luego profundas, amasamientos lentos moderados, presiones palmares, percusiones (golpeteos) y pases sedantes (conocidos también como deslizamientos).

2. PRE-COMPETICIÓN. El masaje debe ser corto y sin ningún tipo de dolor. Como su mismo nombre lo dice, se proporciona antes de la actividad deportiva. 

• Se busca conseguir: Estimular la musculatura y el sistema nervioso, aumentar el tono muscular y proporcionar calor provocando hiperemia (aumento de irrigación sanguínea), consiguiendo con ello retrasar la aparición de la fatiga y la prevención de las lesiones.
• Maniobras básicas : Fricciones superficiales y rápidas, amasamientos suaves y poco profundos, percusiones estimulantes y sacudidas de todo el miembro a tratar para finalizar.

3. POST-COMPETICIÓN. En esta fase de la competición el masaje es corto, lento y profundo, con una duración de entre entre 10 y 15 minutos aproximadamente. Es muy importante tanto el momento de realización como las técnicas manipulativas empleadas para ahorrar problemas posteriores. Esto es así debido a la extrema fragilidad y sensibilidad de las fibras musculares después de un gran esfuerzo. El masaje debe de iniciarse después de que las frecuencias respiratorias y cardiacas vuelvan a la normalidad y se consiga una buena hidratación.

• Se busca conseguir: Suprimir posibles espasmos musculares (calambres), eliminar metabolitos de desecho (lactato) y relajar la musculatura.
• Maniobras básicas: Fricciones de intensidad media, amasamientos moderados, presiones palmares centrípetas (hacer fuerza hacia dentro), vasoconstricciones suaves (apretones) y una serie de percusiones suaves.

 

Los beneficios del masaje son: 

 

• Ayuda a la prevención de lesiones de partes blandas: músculos y tendones
• Estimula la circulación sanguínea y linfática
• Elimina toxinas y sustancias de desecho metabólico
• Retrasa la aparición de fatiga muscular
• Evita la formación de adherencias (fibras de colágeno que entorpecen el movimiento) y las elimina una vez formadas
• Ayuda a la realineación de las fibras musculares tras una lesión
• A mantener tu cuerpo en equilibrio para prevenir lesiones en un futuro
• Brinda una correcta oxigenación a órganos importantes como el cerebro, el corazón, los pulmones y el sistema digestivo.

 

 

 

DE ACUERDO CON EL CICLISMO EL MASAJE SE CONCENTRA EN: Piernas, principalmente en las pantorrillas. Se hace lento, profundo y más prolongado, con una duración de unos 15 a 25 minutos.