Calentamiento ¿la parte más importante del entrenamiento?

 

 

Muchas veces, por la maldita falta de tiempo, nos saltamos esta parte antes de comenzar un entrenamiento sin saber el mal que nos estamos haciendo. No importa si es antes de que tomes tu bici y salgas a rodar o si estás a punto de comenzar un entrenamiento de fuerza en el gimnasio. ¡SIEMPRE DEBES DE CALENTAR!

 

Estas son las 4 razones más importantes por las que no te debes perder esta fase del entrenamiento. 

 

 

  1. Si sometes al músculo a un esfuerzo importante de forma brusca y sin darle tiempo para que se prepare, aumentas las posibilidades de lesión, ya que no dispone todavía ni de la temperatura ni de los nutrientes necesarios para poder funcionar al 100%.
  2. Respecto a la técnica y a la coordinación, un buen calentamiento te prepara mejor para afrontar cualquier tramo técnico.
  3. A nivel respiratorio, mediante el calentamiento aseguras un correcto aporte de oxígeno a las células musculares, al cerebro y al corazón.
  4. Finalmente, desde un punto de vista psicológico, a través del calentamiento te vas preparando para el tipo de esfuerzo que realizarás.

 

 

Ahora bien ¿cómo caliento?

 

Básicamente, un calentamiento genérico (cuando sales a rodar) sería el siguiente:

 

1. 10-15 minutos de rodaje suave, sin forzar.

 

2. A continuación, 5 minutos en los que iras incrementando gradualmente la intensidad, terminando a una intensidad más o menos al 90% de tu FC máxima.

 

3. Lo siguiente sería hacer 3 sprints de unos 20 segundos de duración a una intensidad casi máxima, descansando un minuto entre sprints.

 

4. Por último, otros 5 minutos suaves. 

 

 

¡IMPORTANTE! Estirar antes no aporta ningún beneficio extra. El estiramiento se debe realizar una vez que los músculos están calientes, esto es después de un calentamiento y al final del trabajo.