Cómo saber si usas tu asiento muy bajo

Estos síntomas son muy típicos de llevar el asiento bajo. Por nuestra experiencia haciendo análisis biomecánicos tenemos comprobado que el 90% de las molestias en la cara anterior de la rodilla se deben sencillamente a que el asiento está demasiado bajo y por lo tanto le falta extensión a la pierna durante la pedalada. Este es quizá el error más frecuente en los bikers que llevan poco tiempo pedaleando. Por seguridad en las bajadas tienden a llevar el asiento demasiado bajo y a veces tiene estas consecuencias.

Llevarlo así, además de generar molestias de rodilla también impide al ciclista desarrollar toda la potencia que sus piernas pueden generar, es decir, se pierde fuerza. Con el asiento demasiado bajo la sensación de fatiga en los cuádriceps aumenta considerablemente. Cuando la altura es la correcta, debemos sentir una fatiga generalizada, nunca aislada en los cuádriceps.

Nuestra recomendación es que vayas subiendo el asiento de 5 en 5 milímetros hasta que notes que la molestia desaparece. No está de más comprobar que la alineación de las calas es la correcta. Para ello, solo debes comprobar visualmente que la dirección de la cala coincide aproximadamente con la del zapato. Por sensaciones, debes notar que la posición del talón al pedalear es lo más natural posible, es decir, que el talón no está forzado ni hacia la biela ni hacia el exterior. Cuando el asiento está demasiado alto, las molestias en la rodilla suelen aparecer más bien en la cara externa de la rodilla y/o por detrás de la misma.